Maga: Canto IV (Efigie de carne lejana)

[John]
Los versos en llamas humeantes, y las voces en las cenizas.
La voz de mi terapeuta son una deidad oculta.
Censuro las verdades amargas del clamor puro.
Auroras de uvas y el sosiego del azúcar.
Fumar el eco de la brisa innata.
Inquilino de piropos fluviales.
El bostezo de los astros, cuando digo tu nombre.

Mi alma gemela esparcida en la arena.
Cupido el chef, su sazón para hervir un desamor lentamente.
Mi corazón desabrido, sin ajo, sin pimiento, sin ti y en el congelador.

Las promesas agridulces, aperitivo de la perdición.
Curtido de pena con dos gotitas de mi maldita sombra violeta.
Quemó mis sueños, salpimentó el dolor con una pizca de horror.
Amargo trago de un panal de amoríos sin sabor, cuando estoy sin ti.

Cambiando brújula del consumido sentir.
Cambia de rumbo, partituras de querer en el porvenir.

Súbita piel que me ciega la pulida razón,
cuando veo tu figura en los pasillos.

Todo el mundo aprende amar el querer, querer el amar.
En algún momento…

Toda espiga sobre el amor es anomalía fantasma.