[Verso 1]
[Jack]
Cuando ellas me ven, quieren otra poesĂa, entonces me invita a dar una vuelta, como si fuĂ©ramos espĂas a perseguir la lujuria, soy un jugador que ha entendido todas sus jugadas, y tengo las reglas quebrantadas bajo la manga, todos quieren este juego, pero todos están en el banquillo, quien ha dicho que no lo harĂa, porque yo podrĂa adelantar, retroceder, o parar el tiempo, y en cualquier lugar seguirĂ© siendo el mismo.
[Refrán]
Yo podrĂa tomar pastillas para hablar con mi mente.
Yo podrĂa rimar cosas sin sentido que escondan un mensaje.
Yo podrĂa dormir la luz de su imaginaciĂłn para convencerlos de que la libertad no existe.
Yo podrĂa hacer que John deje de reflexionar.
Yo podrĂa hacer que Jack Skellington deje de filosofar.
Yo podrĂa hacer que Homero dejara de rimar.
Yo podrĂa hacer que el demonio deje de blasfemar.
Yo podrĂa hacer que el poeta deje de amar.
[Verso 2]
He dicho que podrĂa… Yo podrĂa follarme a tu puta.
Mira no ha cambiado nada el demonio, sigue con sus blasfemias en su portafolio, sigue en la lĂnea de engranaje para provocar un ataque colateral, nuevo libro con nuevas fans, alguien más para en una noche entretenerme, explicando con tragos que nadie puede entenderme, seducirlas hasta que me besen, me he destapado quiero esta cosa completa, no importa que tan lejos este la meta, hago que se traguen esta cosa entera, que se quede impregnada en su cabeza, estas nuevas perras no tienen vergĂĽenza, con sus cuerpos apostándolos sobre la mesa, si viene la misma puta de vuelta, no la voy a rechazar, porque si vuelve es que hay algo que de mi le llego a gustar, todos en el club bailando como un comando, asĂ como si fuesen mis rimas colisionado, ahora una chica que en el Cceazuay conocĂ, ella se acercĂł a mĂ, fotĂłgrafa ninfĂłmana con mi cuerpo una psicĂłpata, ella es demasiado de lo que me pude haber cogido, gran cuerpo del cual fui un convicto, es solo una chica más, maldita sea, esto me está haciendo daño cada vez más, creo que ella si valĂa la pena, a pesar de haber tenido plegarias muertas en la arena, ya sĂ© cĂłmo es todo esto, una simple noche en donde solo el demonio quieren disfrutar, con poesĂa al oĂdo gimen hasta hacerlas gritar, la cosa se pone áspera, porque las chichas se vuelven fanáticas, hago esto casi todas las noches, vaya en la mierda que estoy, compre un nuevo látigo, para la placentera noche del castigo, Js es demasiado fácil con cuerpos bonitos, pero es que el demonio no diferencia de sentimientos vivos, y honesto voy hacer, a Ă©l solo le gusta coger, pero estoy en incremento que la cima no me puede decir que no, estoy evolucionando y perfeccionándome como si fuera un telĂ©fono, ella me dio su flor de pandora, ahora ella es mĂa ahora.
[Refrán]
Yo podrĂa hacer que John deje de reflexionar.
Yo podrĂa hacer que Jack Skellington deje de filosofar.
Yo podrĂa hacer que Homero dejara de rimar.
Yo podrĂa hacer que el demonio deje de blasfemar.
Yo podrĂa hacer que el poeta deje de amar.
[Verso 3]
He dicho que podrĂa… Yo podrĂa follarme a tu puta.
MaldiciĂłn me embriague de tus suspiros, bebiste whisky como si tus sentimientos no estuvieran vivos, ahora cada vez que me voy todas me necesitan, este es el negocio para poder tener tantas ganas vivas, pero cuando de verdad lo hago, la llamada de ninguna a mi celular le da amparĂł, no tengo razones, tan solo miles de corazones, que en su cama quieren que me descojone, y los que me dijeron que no iba a lograrlo ahora todos me están envidiando, ellos no están triunfando, yo lo estoy alcanzando, estoy por las calles con mis hermanos, pensando en la prĂłxima cosa en la cual deberĂamos superarnos, pero entonces me llegan mensajes a mil por hora, no tengo amor para estas zorras, pero de entre todas me encanto solo una, sin darme cuenta era tu puta, todo lo que digo es real, ni siquiera puedo mentir, sabes que no miento en lo que yo podrĂa decir.