Pablo Neruda
Vendrás conmigo, dije
"Vendrás conmigo" dije sin que nadie supiera
Dónde y cómo latía mi estado doloroso
Y para mí no había clavel ni barcarola
Nada sino una herida por el amor abierta
Repetí: ven conmigo, como si me muriera
Y nadie vio en mi boca la luna que sangraba
Nadie vio aquella sangre que subía al silencio
Oh amor ahora olvidemos la estrella con espinas!
Por eso cuando oí que tu voz repetía
"Vendrás conmigo" fue como si desataras
Dolor, amor, la furia del vino encarcelado
Que desde su bodega sumergida subiera
Y otra vez en mi boca sentí un sabor de llama
De sangre y de claveles, de piedra y quemadura