[Letra de “Caoscrito”]

[Verso 1: Fermín Sanchez + Bernardo Pérez]
Testigo
Te sigo
Vestido
Sálvanos, luz de la venganza
De aquel planeta
Alma gemela
Que con poesía baila
Tu corazón tan frágil
Los tiempos cambian
(Todo el cielo llega así)
Todo rastro de maldad
(Y las gotas que dejó)
Guardan todo su brillar
(Un estanque en potestad)
Cabalgando algún vaivén
Cayendo como verdad
Semejando alguna fe

[Coro: Fermín Sanchez]
Déjenme salir, salir a buscar
Algo pa' entender mejor
Déjenme salir, salir a buscar
Algo pa’ entender mejor
Déjenme salir, salir a buscar
Algo pa' entender mejor
Déjenme salir, salir a buscar
Algo pa' entender mejor
Déjenme salir, salir a buscar
Algo pa’ entender mejor
Déjenme salir, salir a buscar
Algo pa' entender mejor
Déjenme salir, salir a buscar
Algo pa' entender mejor
Déjenme salir, salir a buscar
Algo pa' entender mejor
[Verso 2: Tino el Pingüino]
Que abjuración dejar filtrarse otra opinión ambigua
No memorizo la mitad, me pone erizo lamentar
De tanto soñar el desquicio
Has ido a parar a algún sitio
Ahí donde no hay vuelta hacia ti
Soy lo que pidió ser verdad
Chinga su ma', su ma chinga
Puta su ma', puta su ma'
La ballesta oriental
Ahí ha de estar
Ponte a sumar
Y es que…
Con tal ¿qué hay de tomar? Esté
Cortar y hay que tomarlo
O soportar que me hace mal
Soy un costal de aire infestado
Y no fuera un pinche perro
Ya lo habrían desenterrado
Si de a poco no me quiero
Pero hay días que lo he intentado
Guardaría como un secreto
Mamotretos y el cobalto
Quien te pone siempre un alto
Se evapora siempre a lo alto
Si es favor ¿a quién le falto?
Siendo hedor, error y euforia
Siempre voy a pies descalzos
Ve el baseball
Siembra una historia
Astillas premonitorias
Cuartillas, demonio y Moria
Barquillos, deloreans
Me llenó el karma de minas
Ni yo enterado
Llegara el día que me encuentre
Un millón tirado y
Los doce monos de Bruce
Sus misas vivas
Nos fuimos solos de bruces
Y hay mil salidas, digo
Tenía su olfato y las cruces
Sabía a sulfato y la expuse
Se vio que a ratos atroces
Saldrían sustratos: Marcuse
Soy hambre y minuto
Se oían diminuto
Lo quieren de paro
Poleas y tributos
Solía estar de luto
No sienten reparo
Se dejó los ojos vendados
Si, como Temis, como Cioran
Chale, que ni ecos me han ofrendado
Es cierto, me temo conmocionar