Joaquín Sabina
Raquel es un burdel
Él ha empezado a sudar
Por el esfuerzo de dar gusto al cuerpo
Moviéndose en el lecho
Está en un viejo burdel
Transformado en la boutique del sexo
Discreto y a buen precio

La noche y la soledad
Una calentura de perro
Una carencia afectiva
Lo llevó sin remedio
Al Salón Raquel

Ella no suda jamás;
Está mascando chicle amargo y piensa
Llenar esa despensa
Se mueve sin emoción
Mientras susurra vicios del oficio
Tumbada como él quiso

Se hizo profesional
En una cuesta de enero
Aquella cola del paro
La llevó sin remedio
Al Salón Raquel
Raquel es un burdel
Donde van a parar
Las chicas del amor
Para poder pasar
La cuesta de enero
Raquel es un burdel
Donde, al amanecer
Hay náufragos que van
A la deriva a buscar
Amores de urgencia
Si pueden pagar

Él terminó de pagar
La ropa tiene el tufo del fracaso
Y el whisky sabe amargo
Ella ha empezado a fumar;
Le dice: "Tigre, tú serás mi negro"
Y le sigue mintiendo

Él es un naufrago más;
Ella, una chica perdida:
Dos seres que en la noche
No tienen más salida:
Al Salón Raquel