Vito ZGZ
Alejandría
[Intro] [Película: Medianoche en París]

*-Oye, ¿es buen escritor? Di: ¿has leído sus textos?
-Bueno, no. No se los deja leer a nadie. Lo malo es que cuando se trata de escribir no siente el menor respeto por la opinión de los demás.*

[Vito]
Ah, si vienen a buscarme que tengan que sacarme boca arriba con las suelas por delante
Y, ¿qué vas a contarme, de envidias vueltas carne?
La rutina de perderme en la utopía de encontrarme

El invierno del arte de Dante, el infierno en su guante
Un gigante sin molino hace camino al caminante
De seda y lino es mi destino, mi almirante
Yo no vivo en guerras, no me cosen estandartes

Cuerpos a tierra, mares, dudas y lamentos
Vente de paseo a los muesos que me invento
El laberinto que te pinto era recinto en otro tiempo
De Minos y Teseo, Vellocino del deseo

Y era el amor el trofeo del gladiador
Entraba al coliseo con un libro y una flor
Y era el dolor emperador de aquel lugar
Cuando su dedo pulgar lo tachaba de vulgar

Las flores del mal, cual jardín de los senderos que bifurcan
Los mares que me surca su pasión turca
Al sur de este alma, un consuelo al fin y al cabo por las veces que ni empiezo las cosas que nunca acabo

Y es un clavo en la puerta, al vivir perdiendo tuercas
Morir estando muerta, tan lejos y tan cerca
De la cerca que amuralla mi castillo, mercadillo de mi turno
El brillo del anillo de Saturno

Nocturno compromiso, el paraíso en un jirón
Del diamante exuberante de un amante hecho carbón
La alfombra de cartón del Ateneo, la libertad del reo
Viajando por Alaska en su trineo

Habla mucho el fariseo, yo soy más por lo que callo
Ay, yo soy de abuelas de plaza de Mayo
De los fuegos de Cortázar, la corteza vuelta leña
La vida es sueño, la muerte dueña, el tiempo enseña...

A cosernos las heridas con saliva
De unos labios que perdonan lo que olvidan
Y me tiran por la borda, el río que desborda su mejilla
Acaba siendo mar en esta orilla

De cerillas que me encienden el farol del descontrol
Cumpliendo la condena de Meursault sin ver el Sol
Yo, vengo de un país que está de olvido siempre gris
Y es un tango, herida en la avenida y sin un mango, oye mi canto

Las serpientes que te encanto
Apretándome los dientes cuando nada es para tanto
Nadie merece tu llanto, Espíritu Santo
No ibas a pasarte una vida entera esperando
Un cambio de rumbo al timón de este mundo, o Acuario
Llegando con Simón a mi calvario
A mi monte de las cruces y las luces de neón
No soy de los que corrige cuando rige la presión

Esto me exige poco más que la pasión
Hago de mi ruina rima, no una mina de intención
Detrás de la cortina de carbón había un zafiro
Unas rayas, un pijama y una cama de vampiro

Mi parque del retiro, desnudado de su flora
A su lado es una hora los años que me devoran
¿más la añoras? Más se demora mi banda sonora
Bailándome el agua por si fragua o se evapora

En el fuego de mi espora, en el hielo de tu espera
Aguardando mi llegada en la nevada primavera
Y si fuera hoy el día de mi alegría
Vaya pena tanto verso triste en esta milla es mi condena

En mi pecho, este es mi corazón y buen provecho
Una brecha ancha de noche iba cruzando nuestro estrecho
Árboles sin bosque para los que el leñador era verdugo
Y aún así nunca le negaron su fruto

Al siguiente día, vistió luto la jauría por aquella cacería
Es el humano y su manía de morder las manos que le dan de comer
Cuando hablando de mañanas hace llamas del ayer
Por un peso, esclavos del engaño del progreso
Y sigue preso de las carencias, de los excesos

Duermo en Florencia, en un David de carne y yeso
Y pues eso, te doy la vida entera por un beso
Si hace falta y si no la pita, no se le grita, se le canta
Se debilita, no se decanta
La justicia y su balanza hacia la panza de las madres africanas
Lobo con piel de cordero vende lana y la compra
El mercado con su pompa hasta que rompa el saco
Y "manos arriba", feliz atraco población
Un líder que le dicte a la nación
A los ojos del jurado se ha ganado la ovación

Colección de días de la mano de "sofía"
Con su "filo", cortando la ambrosía con sigilo
Va ganando gramos, va perdiendo quilos
Llueven sobre el Nilo lágrimas de cocodrilo

Y es un oasis la catarsis, no la crisis
No es el desierto buen hogar para una Piscis
Que tiene el cielo ganado y sabe volar libre
Se escapó de un libro de entre versos de jengibre

Que muerdo, la última curda estando cuerdo
Llanero solitario cabalgando mi recuerdo
Atracandóme en el puerto del mar Muerto y cristalino
Mezclando con tabaco, brinda Baco con mi vino

Ya termino, nos vemos cualquier día en el camino amigo mío
Bañados en las gotas del rocío
El viejo y la mar, y esta manera de amar tan mía
Yo te haría la vida poesía, amiga